martes, 14 de noviembre de 2017

IMPORTANTE CORRESPONDENCIA EPISTOLAR

IMPORTANTE CORRESPONDENCIA EPISTOLAR ENTRE EL ESCRITOR HISTORIADOR PERUANO DOCTOR MARIANO FELIPE PAZ SOLDÁN, DIRIGIDA AL MÉDICO Y PREFECTO DE COCHABAMBA DR. CLÉÓMEDES BLANCO FERRUFINO.

 (*) Mariano Felipe Paz Soldán y Ureta
Fecha de nacimiento22 de agosto de 1821, Arequipa, Perú
Fallecimiento31 de diciembre de 1886, Lima, Perú
PadresManuel Paz Soldán y Gregoria de Ureta Araníbar
                                                                         
Fue un historiador y geógrafo peruano. Se le considera el fundador de la moderna historiografía peruana, siendo su aporte más valioso su monumental Historia del Perú. Fue por mucho tiempo el único estudio documentado de las primeras décadas de la República peruana. Es también autor de un Atlas geográfico del Perú, el primero de su género (1865), y de la Narración histórica de la guerra de Chile contra Perú y Bolivia, la primera historia peruana de la guerra del Pacífico (1883).
Como hombre de Estado fue ministro de Relaciones Exteriores (1857) y ministro de Justicia e Instrucción (1869-1870 y 1878-1879).
Nuevamente fue nombrado ministro de Justicia e Instrucción (1878-1879), bajo el gobierno constitucional del general Mariano Ignacio Prado. Interinamente se hizo cargo de la Cancillería, en mayo de 1879, en plena guerra con Chile. 
Ocupada Lima por lastropas chilenas, al igual que muchos de sus compatriotas buscó refugio en Buenos Aires, donde fue nombrado profesor en el Colegio Nacional Buenos Aires y donde escribió y publicó una historia de aquella guerra (1884). En Argentina (donde prácticamente cobró carta de ciudadanía) se destacó por recopilar datos geográficos e históricos y supervisar la edición del célebre Gran Atlas de la República Argentina o Atlas geográfico Argentino. Cuando Lima fue ocupada por los chilenos, se cuenta que salió disfrazado de marinero y se desterró voluntariamente a Buenos Aires, donde se ganó la vida como profesor universitario y publicó La narración histórica de la guerra de Chile con Perú y Bolivia,
Retornó al país en 1885, y un año después falleció tras una penosa enfermedad en su biblioteca, rodeado de sus libros y mapas. Sus últimas palabras fueron: “Dios, patria y escuela para la felicidad de mi país”. Tenía 65 años.
(*) Blanco, Cleómedes Ferrufino (Cochabamba, Bolivia 1828-1893)
Médico cirujano, farmacéutico,  catedrático, higienista se destacó  por realizar importante campaña de lucha contra el paludismo y fiebre tifoidea
.
Natural de Cochabamba, Bolivia, donde recibió la formación primaria y secundaria; inició estudios de medicina en la Universidad de San Andrés de La Paz; en el año 1857 se trasladó a Lima, inscribiéndose en el 7° año de Facultad de Medicina, que completó exitosamente, junto con las prácticas clínicas realizadas en el Hospital de San Andrés de varones y el Anfiteatro donde ejerció como Director. Bachiller y licenciado en 1° de octubre de1859, ejerció un tiempo en Lima y el año 1865 se trasladó a la ciudad de Arequipa, donde fue nombrado Profesor de Clínica Externa, Partos, Enfermedades de Mujeres y Niños, bajo dirección del Decano Dr. Manuel M. Pérez Araníbar; cargo que desempeñó con dedicación y calidad profesional.
Como Cirujano Militar adscrito al Ejército del Perú intervino en los combates del 2 de mayo de 1866 en el Puerto del Callao, y fue declarado por el Congreso “Benemérito de la Patria en grado heroico”. Luego de ejercer varios años en Lima se trasladó a Cochabamba, continuando con el ejercicio de la profesión, fue nombrado corresponsal de la Sociedad Médica de Lima.
En 1874, participó en la elección del sitio destinado al nuevo hospital de la Ciudad de Cochabamba, merced a la petición formulada por el Concejo Municipal, habiendo convocado para el efecto al cuerpo médico local; tomándose en consideración el predominio de la dirección de los vientos existentes, se aprobó el estudio formulado por el Dr. Blanco.
Con motivo de la sequía producida en 1878 y consiguiente hambruna en el Departamento de Cochabamba, se formó una comisión de médicos integrada por los doctores 
Cleómedes Blanco Ferrufino, Mariano Virreira y Julio Rodríguez Morales, certificando la naturaleza de la epidemia como paludismo; agravándose posteriormente con un brote de fiebre tifoidea, originó que un  elevado número de pacientes fueron internados en el hospital.
Como docente ejerció el cargo de Profesor de la Facultad de Medicina y de la Escuela de Obstetricia. Incursionó en la política fue  elegido Vocal y luego Presidente del Concejo Municipal y Prefecto de Cochabamba.
Publicó los siguientes estudios: Hidrotórax izquierdo producido por la supresión de un exantema. Gaceta Médica, Lima 1863; Piotórax del lado izquierdo consecutivo a una pleuresía, GM 1863; Memoria sobre la acción patógena del pepino (solanum variegatum) GM 1863; Nuevo método de tratamiento del tétanos por la cicuta, con 206 observaciones, 1864; y el especial estudio científico titulado “Constitución médica de Cochabamba” publicado en la Gaceta Médica de Lima. 1875.
Falleció en Cochabamba el 12 de junio e 1893; en homenaje a su memoria y labor profesional, un pabellón del Hospital Viedma lleva su nombre
.
Hijo del primer presidente boliviano Pedro Blanco Heredia asesinado en la Recoleta por Ballivián Armaza y Vera 1828. Casado con Edelmira Galindo Argüelles (Hija del Gral. León Galindo del ejército Libertador de Simón Bolívar. 

I.- S.D.D Cleómedes Blanco
Lima, mayo 2 de 1882
Muy querido amigo:
He tenido mucho gusto con la lectura de su carta del 31 de Marzo.
Lo felicito por el nacimiento de un hijo varón que heredará las virtudes y méritos de su abuelo y de su padre (Se refiere al Gral.  Pedro Blanco Heredia y al Gral. Carlos Blanco Galindo); tiene buenos ejemplos que imitar, y él como los que nazcan en adelante sabrán  vengar las ofensas que nuestras dos naciones han recibido de Chile.
Me sirve de gran satisfacción y consuelo el saber que en Bolivia, con raras excepciones, todos están de acuerdo en no ceder á las insolentes e insensatas pretensiones de Chile. No necesitamos para burlarlo sino resignación y esperar
Es cierto que con este plan se sufrirá mucho, en particular el Perú que está en las garras de un enemigo, y devasta la propiedad privada y se adueña de las entradas fiscales pero estas no bastan para  reponer las continuas bajas de su ejército por la peste, la deserción y los pequeños encuentros con las guerrillas en el interior.
De enero a la fecha han perdido más de dos mil hombres, sin contar los enfermos que por centenares y como inválidos van a Chile en los vapores.
Yo y muchos otros estamos persuadidos de que los Estados Unidos tomarán parte muy activa en nuestros negocios y obligarán a Chile a ceder e sus pretensiones; así lo deducimos de la lectura de los diarios de aquella nación; de cartas particulares de muchos neutrales y de lo que aconsejan la política y los intereses de aquella nación.
Le repito, Bolivia y el Perú solo necesitan seguir como hasta hoy, firmes y unidos.
Aquellos que como Salinas Vega, Arce y un círculo creen que uniéndose a los chilenos obtendrán la posesión de Arica y todo el departamento de Tacna, solo piensan en lo presente y no quieren ver las consecuencias que la menor sería una prolongada aunque intermitente guerra, cuyos gastos serían mayores que las ventajas que proporcionarían Arica y Tacna.
Yo creo que nada es más fácil que un arreglo definitivo y perdurable en las cuestiones aduaneras entre nuestras repúblicas; únicas que han perturbado y pudieran perturbar nuestras buenas relaciones.
El día que los ferrocarriles de Puno y de Tacna se prolonguen, el uno hasta La Paz y el otro hasta Oruro y otro punto del otro lado de la cordillera, nada habría que desear, desde que los carros de mercaderías desembarcadas en Arica o Mollendo pudieran pasar cerrados y sellados hasta Bolivia. Dejando Bolivia los derechos que produzcan sus mercaderías en beneficio de un empresario; y que  el Perú por otra parte también  contribuya a ello, no faltarán  especuladores que ejecuten esas obras. Felizmente, los hombres que gobiernan nuestros  países, ya tienen la convicción  de que este es el medio más barato y eficaz de borrar toda causa e mala inteligencia.
Yo sigo siempre en mi tarea antigua de escribir la Historia de mi patria; ya tengo listos para  dos o tres volúmenes; uno de ellos abraza la época de 1827-1833 en la cual tanta parte cupo a Bolivia y a su señor padre el héroe de Junín y Ayacucho General D, Pedro Blanco Heredia.; no la he impreso, porque he creído que durante nuestra guerra actual con Chile, no convenía pues de ella sacaría argumentos  para injuriarnos.
También tengo escrito mucho sobre la presente guerra y si no me encontrara tan escaso de recursos ya la habría enviado a Francia para que allá se imprima.
Tengo la convicción que quizá lea lo que he escrito, verá con claridad todos los hechos desde sus antiguos antecedentes hasta hoy día.
Pero, ¡Qué hacer  amigo mío! Cuando en la actualidad  conseguir mil quinientos o dos mil pesos plata es casi imposible.
Con este motivo le diré que necesito tener algunos folletos muy importantes publicados en Bolivia y que espero que Usted me haga el favor de conseguirlos. Son los siguientes:
1º Informe del Gral. Campero a la Convención Nacional de 1880. Como general en jefe del ejército aliado y un cuadro con el plano de la batalla (Se refiere a la batalla del Campo de la Alianza en Tacna 17 mayo 1979)
2º. Semblanzas de la guerra el Pacifico por J.V. Ochoa.
3º.-Ligeras reminiscencias del Capo de la Alianza por el Coronel Miguel Aguirre.
4º1 Informe histórico del Servicio prestado por el Cuerpo de Ambulancias del Ejército Boliviano, por el Dr. Zenón Dalence.
5º. Dos palabras al Exmo. Sr. Narciso Campero por Joaquín Lemoine.
6º Daza y las Bases chilenas de 1879 por Gabriel René Moreno.
Tengo algunos de estos pero en cuadernos de los Diarios que no tienen los documentos ó cartas. Si me los consigue, mándemelos por algún  conducto seguro, mas NO por el correo, porque se pierden, pues los chilenos se apropian e lo que quieren y aún abren las cartas y a veces no les dan curso; por esto las que V. me envíe que vengan bajo el sobre de alguna casa de comercio.
Por lo que hace de negocios y estado de toda mi familia, tengo el gusto de comunicarle que en los funestos años de 1879 al presente, todos gozamos de salud corporal, aunque el espíritu afligido por las desgracias públicas.
Carlos y Pepita le retornan sus afectuosos recuerdos; mi descendencia; ya tengo nueve nietos, dos de ellos hombrecitos; y de un momento a otro espero uno más.
Panchita que lo recuerda a V continuamente me encarga saludarlo. También goza de salud. Yo, aunque viejo, conservo toda la fuerza de espíritu suficiente para contribuir a sostener el entusiasmo patriótico y no desmayar hasta que nuestras repúblicas se vean libres de su feroz enemigo, y que un día llegará en que mejor preparados y con buen jefe al frente, lograremos lavar nuestras desgraciadas manchas en la guerra presente.
Salude V- a la Sra. Edelmira, y V. sabe que en esta su casa lo queremos muy de corazón.
Su amigo
Mariano Felipe Paz Soldán.
………………………………………………………………………………..
II.-
Sr D.D. Cleómedes Blanco
Lima, Octubre 26 de 1882
Mi querido amigo.
Su carta del 6 de agosto (fecha de recuerdos  gloriosos para la patria de V.) animándome el envío de algunos folletos publicados allá,  los recibí oportunamente y hace casi un mes que están en mi poder todos esos impresos. Ante todo diré a V. que los Diarios de Cochabamba que me mandó V.  honran a cualquier país, porque ellos dan a conocer que hai hombres que se ocupan en estudios serios.
Lo felicito á V. por tales progresos y aliente á los que tan ilustradas publicaciones hacen.
He leído y analizado todos los demás cuadernos; al de Zenón Dalence es también una honra para Bolivia y para su autor; en el se vé buena fé, patriotismo y el buen cumplimiento de su deber; no así  el del joven Ochoa que si manifiesta talento, le falta la imparcialidad y moderación en su lenguaje, sin esos graves defectos, ese joven hubiera ganado grande reputación.
Agradezco a V. amigo querido, el valioso contingente de esos folletos que me han servido de mucho en mi actual trabajo y me han aclarado muchos puntos oscuros ó dudosos; ha hecho V. un servicio a su patria y a la historia;  porque en cuanto yo escribo proceso con fría imparcialidad y verdad histórica por esto le agradeceré  infinito que no deje V. de enviarme cuanto se haya escrito relativo a la actual guerra; muy especialmente le pido lo siguiente:
El de Gabriel René Moreno sobre Daza y las Bases chilenas
Defensa de Luis Salinas Vega
Diario de la Campaña por Ochoa
Diario de la Campaña se la 5ta División del Gral. Campero.
Entiendo que se ha publicado también una historia de la guerra por un señor Núñez.
En una palabra, no deje V de remitirme cuanto  pueda, ya que sacaré provecho de todo cuanto tenga V reunidos algunos folletos puede V. entregarlos al Ser. Gregorio de las Carreras, en Coro Coro, ó bien, mandarlos por persona segura á Tacna dirigidos al r. Guillermo Mc Lean, con una cartita diciéndome que me los remita a Lima. El señor está ya advertido.
Hasta hoy nada de importancia se ha publicado en Lima por la absoluta prohibición de imprimir nada que se refiera a negocios políticos; pero uno que otro cuadernito  publicado en Guayaquil los tendrá V. tan luego como encuentre conducto seguro- y cuidaré  reunir y separar cuanto se publique.
Creo que sería útil para Bolivia  el que circularan aquí algunos de los folletos que V. me remite, que yo me encargaré de entregarlos á personas que saquen provecho histórico.
En cuanto a política en relación con la actual guerra ¿Qué le podre decir querido amigo?
Estamos sin libertad, estamos muriéndonos de hambre. Los  pesos fuertes representados en casas, chacras, haciendas, se han convertido  en dos centavos plata; y sin embargo, nos imponen contribuciones enormes; a mí y á mi hijo, no han impuesto cuatro mil soles plata, o sea, sesenta mil soles billetes; y vendiendo mis muebles y comprometiendo mi crédito he podido pagar  por salvarme de un destierro y vejaciones.
Creen los chilenos que de este modo conseguirán que se firme la paz tal cual  ellos lo desean y en mi opinión se equivocan.
En fin, amigo mío,  es preciso sufrir con resignación los males presentes que servirán de lección, no a mí y otros que ya somos viejos, sino a los jóvenes. Por esto conviene generalizar la instrucción y enseñar lo que es Patria, lo demás vendrá por sí.
En casa todos buenos felizmente. Pero con la familia de mi hijo, porque los chilenos se han apropiado de su casa porque en los bajos estaba el telégrafo.
Reciba V. memorias de Panchita, Carlos, Pepita, Sabe V. que lo queremos mui de veras, como el mejor amigo.
Mariano Felipe Paz Soldán.
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III.-
Sr. Dr. Cleómedes Blanco
Buenos Aires. Enero 15 de 1885
Mi querido amigo.
Ha sido un gran consuelo para mi, la lectura de su afectuosa Carta13 de Noviembre último, que recibí con notable estudio.
En Lima recibí algunos folletos que V. me remitió y le contesté acusando recibo; no recuerdo si son los que encomendó V al Sr, Leitter.
Bien comprenderá V lo que sufre mi corazón al ver lo que pasa en el Perú; parece que allá todos han perdido el juicio.
El traidor Iglesias habría caído por sí solo dejándolo en Lima; pero Cáceres procedió de distinto modo y eso lo ha asegurado en su silla por algún tiempo más. No hai otro consuelo que esperar.
El libro que publiqué aquí: ”Narración histórica “ se lo remitiré en la próxima oportunidad ; de pronto le envío un cuadernito que contiene el índice, Prólogo y el Juicio de la prensa argentina.
Estoy aquí con Panchita y tres de mis nietecitas que me sirven de consuelo. En la actualidad estoi haciendo imprimir el “Diccionario Geográfico Estadístico Argentino”.
Antes de un mes principiaré también a imprimir la Historia de la Confederación Perú Boliviana. Esto alivia en parte la amargura del destierro.
Felizmente aquí he recibido, yo y mi familia, muy distinguidas pruebas de aprecio, de toda la sociedad más notable. Panchita retorna a V. sus afectuosos recuerdos y me encarga se los dé V a su amable Señora con n besito a sus hijitos..
Sabe V cuan de corazón lo quiere y aprecia un viejo amigo.
Mariano Felipe Paz Soldán.

La  dirección de mi casa es Juncal 131.

Al pie existe una nota con la letra del Dr. Cleómedes Blanco Ferrufino
“La Razón Nº 149. Carta de Zoilo Flores.
Bolivia en la Guerra del Pacifico.  Fuentes 112.
La Gaceta Municipal”               
Posiblemente son los folletos que envió al historiador Paz Soldán.

COMENTARIO:
Tres extensas cartas enviadas por el reconocido historiador peruano al amigo médico también político boliviano egresado de San Marcos e iniciado profesionalmente (Arequipa-Lima). En Cochabamba tuvo una gran actuación médica, cívica, política y humanitaria.
  Es notable la información que se extrae de las cartas enviadas a Cochabamba, los juicios de valor histórico, las dificultades de vida y la labor desempeñada por el historiador Paz Soldán cuyos textos son de consagrada lectura y estudio.
El patriotismo que decantan así como el sufrimiento por la invasión chilena a Lima, la capital del Perú; son elocuentes en el relato que revela realismo y tormento existencial.
La guerra vejó también a la soldadesca chilena pero sobre todo a la dignidad del pueblo peruano y del boliviano. Importa conocer que los medios de prensa en Bolivia, sobre todo en Cochabamba, El Heraldo y El Comercio, publicaban impresos de gran valor. Los envíos desde Cochabamba al escritor Paz Soldán fueron instrumentos útiles que aportaron, gracias a la genuina amistad de ambos seres, documentación primaria fundamental y sobre todo veraz en favor de Bolivia y del Perú.
La biblioteca del Gral. Carlos Blanco Galindo entregada al Sr. Fernández de CONDEPA para enriquecer los archivos municipales de la Casa de la Cultura de Cochabamba, contenía toda la colección histórica del escritor Mariano Felipe Paz Soldán. Lastimosamente, se perdieron.
Dr. Gastón Cornejo Bascopé
Presidente de la Sociedad de Geografía, Historia y Estudios Geopolíticos Cochabamba.
Ex Senador de Bolivia
                                  Cochabamba, noviembre de 2017
Mar para Bolivia: www.cochabamba-historica.com
Cel. 774-46696   - 44281788




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